A S. E. EL GRAN MARISCAL DE AYACUCHO ANTONIO JOSÉ DE SUCRE, ENCARGADO DEL MANDO SUPREMO DE LA REPÚBLICA DE BOLIVIA.
Grande y buen amigo:
Es inexplicable mi gozo al participaros el reconocimiento de la independencia y soberanía de la república de Bolivia por la del Perú.
Señora de sí misma, puede escoger entre todas las instituciones sociales las que crea más análogas a su situación y más propias para su felicidad. Un pueblo que acaba de nacer, y que ha sacudido, con las cadenas que lo aherrojaban, las leyes del gobierno español, puede recibir todas las mejoras que le dicte su sabiduría. Bolivia tiene la ventura en sus manos. Yo saludo cordialmente a esa nueva nación, y os felicito, grande y buen amigo, porque veis recompensados, en parte, vuestros eminentes servicios, y vuestros esfuerzos para elevarla al puesto que hoy ocupa.
Cuando tuve la dicha de visitar esa tierra afortunada, los representantes del pueblo me honraron pidiéndome un proyecto de constitución. Bien sabia que esta empresa era muy ardua y muy superior a mis fuerzas, pero, ¿qué rehusaré YO a ese estado? He bosquejado la que me tomo la libertad de enviaros con una alocución a los legisladores. Os ruego, grande y buen amigo, presentéis al Congreso este débil trabajo que ofrezco a los ciudadanos de Bolivia como un homenaje de mi gratitud, y una prueba de mi respeto a sus preceptos.
Dado, firmado y refrendado por mi secretario general, en el cuartel general de Lima, a 25 de mayo del año del Señor, de mil ochocientos veinte y seis.
Por S. E. el Libertador Presidente.
El Secretario General.
Grande y buen amigo:
Es inexplicable mi gozo al participaros el reconocimiento de la independencia y soberanía de la república de Bolivia por la del Perú.
Señora de sí misma, puede escoger entre todas las instituciones sociales las que crea más análogas a su situación y más propias para su felicidad. Un pueblo que acaba de nacer, y que ha sacudido, con las cadenas que lo aherrojaban, las leyes del gobierno español, puede recibir todas las mejoras que le dicte su sabiduría. Bolivia tiene la ventura en sus manos. Yo saludo cordialmente a esa nueva nación, y os felicito, grande y buen amigo, porque veis recompensados, en parte, vuestros eminentes servicios, y vuestros esfuerzos para elevarla al puesto que hoy ocupa.
Cuando tuve la dicha de visitar esa tierra afortunada, los representantes del pueblo me honraron pidiéndome un proyecto de constitución. Bien sabia que esta empresa era muy ardua y muy superior a mis fuerzas, pero, ¿qué rehusaré YO a ese estado? He bosquejado la que me tomo la libertad de enviaros con una alocución a los legisladores. Os ruego, grande y buen amigo, presentéis al Congreso este débil trabajo que ofrezco a los ciudadanos de Bolivia como un homenaje de mi gratitud, y una prueba de mi respeto a sus preceptos.
Dado, firmado y refrendado por mi secretario general, en el cuartel general de Lima, a 25 de mayo del año del Señor, de mil ochocientos veinte y seis.
Por S. E. el Libertador Presidente.
El Secretario General.
1 comentarios:
Bolivar y Sucre la gloria de America
Publicar un comentario